Comer fuera de casa de manera saludable: Una guía práctica
Comer fuera de casa de manera saludable: Una guía práctica
Comer fuera de casa no tiene por qué ser sinónimo de una dieta poco saludable. Con un poco de planificación y algunos trucos, es posible disfrutar de una comida fuera sin comprometer tus objetivos nutricionales. Aquí te dejo algunos consejos para mantener una alimentación saludable incluso cuando no estás en casa.
1. Investiga y elige restaurantes saludables
Antes de salir, investiga los restaurantes en tu área que ofrezcan opciones saludables. Muchos restaurantes ahora tienen menús disponibles online, lo que te permite revisar las opciones antes de llegar. Busca lugares que ofrezcan ingredientes frescos, opciones de comidas vegetarianas y menús que incluyan la información nutricional.
2. Haz preguntas y personaliza tu pedido
No tengas miedo de hacer preguntas sobre cómo se preparan los alimentos o de pedir modificaciones en tu comida. Pide que los platos sean cocinados con menos aceite, que las salsas se sirvan aparte, o que las verduras se preparen al vapor en lugar de fritas. La mayoría de los restaurantes están dispuestos a hacer ajustes para acomodar tus preferencias.
3. Controla las porciones
Las porciones en los restaurantes a menudo son más grandes de lo necesario. Considera compartir un plato principal con alguien más o pedir una porción más pequeña, si es posible. Otra opción es pedir una ensalada como entrante y elegir un plato principal más ligero.
4. Elige Bebidas Inteligentes
Las bebidas pueden añadir una cantidad significativa de calorías a tu comida. Opta por agua, té sin azúcar, o bebidas bajas en calorías en lugar de refrescos azucarados o cócteles. Si quieres disfrutar de una bebida alcohólica, elige vino o una cerveza 0,0 y consúmela con moderación.
5. Opta por preparaciones saludables
Elige platos que sean a la parrilla, al horno, al vapor o salteados en lugar de fritos. Estas opciones tienden a ser más bajas en grasas y calorías. Además, prefiere platos que incluyan una buena cantidad de verduras, proteínas magras y granos enteros.
6. Evita los extras calóricos
A menudo, los extras como el pan con mantequilla, las patatas fritas o los aderezos pesados (como salsas) pueden añadir calorías innecesarias a tu comida. Pide que estos extras se sirvan aparte o simplemente evita consumirlos. Opta por vinagretas en lugar de aderezos cremosos.
7. Come despacio y disfruta
Tómate tu tiempo para comer y saborea cada bocado. Comer despacio no solo te ayudará a disfrutar más de la comida, sino que también permitirá que tu cuerpo registre cuando estás lleno, ayudándote a evitar comer en exceso.
8. Planea con anticipación
Si sabes que vas a salir a comer, ajusta tus comidas durante el día para equilibrar tu ingesta calórica. Opta por comidas más ligeras y nutritivas en casa para tener margen de disfrutar más cuando salgas. Además, no te saltes comidas antes de salir, ya que esto puede llevarte a comer en exceso cuando finalmente te sientas a la mesa.
9. Mantén un balance
Comer fuera debe ser una experiencia agradable y no una fuente de estrés. Permítete disfrutar de tus comidas favoritas de vez en cuando, pero hazlo con moderación. Un enfoque equilibrado te permitirá mantener un estilo de vida saludable sin sentirte privado.
10. Aprende a decir NO
No te sientas obligado a aceptar todas las ofertas de comida que te hagan. Si no tienes hambre o si la opción no es saludable, está bien decir no. Escucha a tu cuerpo y actúa en consecuencia.
Siguiendo estos consejos, podrás disfrutar de comidas fuera de casa sin comprometer tu salud. La clave está en hacer elecciones informadas y equilibradas que te permitan disfrutar de la comida y mantenerte en el camino hacia tus objetivos de bienestar. ¡Buen provecho!